Base: Lunar Spaceport Unison
Nación: Sociedad de Naciones
Localización: inmediaciones del cráter Shackleton (Polo Sur lunar)
Población: 9.000 habitantes
Colonias: Base Thoth 1 (Monte Malapert), Unison Woodrow Wilson (Mare Serenitatis), Astropuerto Herekore.
La base Lunar Spaceport Unison, más conocida simplemente como Unison, es construida a instancias de la Sociedad de Naciones con el afán de servir de puerto de entrada internacional a la Luna. Es un puerto-base franco gestionado por la Sociedad de Naciones con el fin de facilitar la cooperación en asuntos de derecho espacial, salvaguardar la paz por medio de un gobierno global (refrendado por amplio consenso de todas las naciones), garantizar la seguridad y servir como punto de encuentro en asuntos de especial trascendencia. La base Unison, a diferencia del resto de base lunares, se considera territorio de libre tránsito, y suele ser la sede donde debatir asuntos que afectan a todas las naciones o mediar en posibles conflictos que surjan entre las diferentes colonias que pueblan la Luna. Como garante de la seguridad y del cumplimiento íntegro de los tratados ratificados por todas las potencias, la Sociedad de Naciones tiene potestad para recurrir a la fuerza si lo considerara necesario.
Historia
La Sociedad de Naciones, como organismo institucional, nace tras el tratado de Versalles en 1919, justo después del fin de la I Guerra Mundial. Su fundación respondía a la necesidad de garantizar la cooperación internacional, el arbitraje ante posibles conflictos y la seguridad colectiva.
Sin embargo, los primeros años de la recién creada organización internacional fueron difíciles. Al tratarse de una institución aún poco asentada, fue incapaz de frenar los terribles acontecimientos que, pocas décadas después, desembocarían en un nuevo conflicto armado a escala mundial. Curiosamente, fue justo tras el fin de la Segunda Guerra Mundial cuando la Sociedad de Naciones salió reforzada en su lucha por garantizar una estabilidad necesaria y que fuese duradera.
Los años posteriores servirían a la Sociedad de Naciones para asentarse definitivamente como una organización fuerte y respetada por la mayoría de países del mundo. Tras mediar diplomáticamente en la resolución de muchos conflictos, la Sociedad de Naciones pronto fue consciente de que sin una fuerza militar que salvaguardara el cumplimiento de sus mandatos, difícilmente podría hacerlos respetar.
Su organización militar se llevó a cabo en décadas posteriores y contó con efectivos procedentes de todas las naciones hasta formar una enorme coalición armada cuyo cometido principal era hacer respetar los procesos de paz y la seguridad internacional.
Por supuesto, el proceso de colonización espacial no pasó desapercibido para la ya establecida Sociedad de Naciones que intuyó, con acertado criterio, que este nuevo escenario sería sin duda un nuevo foco de conflicto territorial. Sin una legislación que avalase la colonización, que estallara una nueva contienda entre las grandes potencias era cuestión de tiempo. La carrera espacial ya era imparable y la Sociedad de Naciones debía responder a esa realidad.
A instancias de este organismo se firmaron, durante los años 1975 primero y 2048 después, los primeros tratados que refrendaban que la Luna era un territorio libre de fronteras y perteneciente al conjunto de la humanidad. A pesar de todo, se establecerían zonas de influencia donde las principales naciones podrían establecer sus bases.
Sin embargo, la Sociedad de Naciones, como representante de la seguridad internacional, comienza con la construcción en el año 2019 de su propia base avanzada, la Lunar Spaceport Unison. El proyecto se desarrolla en varias fases que se inician con el despliegue de módulos terrestres muy cerca del cráter Shackleton, en el polo sur de la Luna. La Sociedad de Naciones elige este emplazamiento atendiendo a la exposición permanente de la luz solar sobre la zona y a la proximidad de las principales fuentes de agua congelada que se hallan en el satélite.
A esta fase temprana de la construcción le sigue el envío de cargueros que transportan maquinaria pesada, con la que se da inicio a la construcción de una gran base en superficie y que más tarde se extendería de manera subterránea hacia el interior del satélite. Por lo tanto, la Unison es un híbrido entre una base construida en superficie y otra parte excavada bajo tierra.
El primer transporte con personal a la base Unison está compuesto por un equipo de ingenieros y científicos que ultiman las fases finales de la construcción y allanan el terreno para la ampliación a una colonia superior.
Tras la edificación de los departamentos civiles de la base Unison, se comienzan a cimentar los acoplamientos militares y de puertos para astronaves. Esta fase se concluye en un tiempo récord de apenas cinco años y queda establecido el primer regimiento militar bajo mandato de la Sociedad de Naciones.
La primera nave con personal civil y militar, cuyo propósito es establecerse definitivamente en la base Unison, aluniza el 15 de septiembre del año 2024. En la nave viaja el diplomático Tom Shepard, antiguo catedrático de derecho espacial e impulsor de la legislación sobre colonización lunar. El profesor Shepard se convierte en el primer dirigente de la base Lunar Spaceport Unison.
A finales del año 2047, la base Unison se ve obligada a intervenir en el primer conflicto bélico que se registra sobre suelo lunar después de que un grupo minero resultase atacado por una avanzadilla alemana. Los aliados no tardaron en responder y bombardearon una instalación de comunicaciones nazi en el cráter Eudoxus (que da nombre al conflicto).
Desde la base Unison se hacen llamamientos a la calma y se fomenta un encuentro internacional donde se establecerán definitivamente las zonas de influencia en territorio lunar. De esta gran conferencia internacional saldrá ratificado el Tratado Trilateral de Colonización y Explotación Lunar (TTCEL), que delimita las fronteras y establece un protocolo en caso de conflicto.
El territorio conocido como Mare Serenitatis queda designado como zona libre de influencia y bajo control de la Sociedad de Naciones. Se establece la segunda colonia dependiente de la base: la Unison Woodrow Wilson, una base militarizada y dotada de un gran astropuerto para naves de combate. El objetivo de la Unison Woodrow Wilson es servir como barrera fronteriza entre las dos grandes potencias presentes en la Luna.
En el transcurso del año 2051 se produce una extraña epidemia que afecta a varios miembros de la base Unison. Se desconoce el origen de este brote, que causa erupciones en la piel e hipersensibilidad a la luz. Se sospecha que se había originado meses antes en la base alemana Reinhard Heydrich, donde causó una veintena de muertos, y se transmitió después por mediación diplomática en encuentros bilaterales. Como resultado, varios miembros del gabinete de la base Unison fueron evacuados de vuelta a la Tierra, entre ellos el viejo profesor Tom Shepard, que se vio obligado a abandonar el cargo y que moriría poco después de llegar al planeta.
Pocas semanas más tarde, y a bordo de un carguero que transporta los primeros mech de combate con que contaría la base Unison, aluniza el islandés Ármann D. Saell, miembro de las fuerzas armadas de la Sociedad de Naciones y que sustituye en sus funciones de gobernador al malogrado Tom Shepard. El carácter hosco del almirante parece ser del agrado de los dirigentes de la Sociedad de Naciones, que creen necesario colocar al frente de la base Unison a un hombre de formación militar ante la presumible escalada de violencia que se avecina tras poner las grandes potencias un ojo en el vecino planeta Marte.
En el año 2057, la base Unison deja de percibir fondos para su expansión sobre suelo lunar en detrimento de su futura presencia en suelo marciano. A cambio, recibe un nuevo destacamento militar que se acantona en la base Unison Woodrow Wilson, recientemente ampliada.
Descripción
La base Unison es uno de los centros tecnológicamente más avanzados presentes en la Luna. Su arquitectura se divide en dos estructuras principales: una en superficie, directamente conectada a un astropuerto, y otra soterrada a la que sólo se puede acceder a través de la primera.
El acceso principal de la Unison se encuentra en las inmediaciones del cráter Shackleton, en el llamado astropuerto Herekore, una enorme explanada donde aterrizan las astronaves y en cuyo centro destaca la silueta del dios egipcio Thoth, símbolo de la Luna para los antiguos egipcios, y adoptado como emblema por la Sociedad de Naciones para sus instalaciones lunares.
Desde el astropuerto Herekore se extiende una ancha carretera asfaltada que discurre paralela a varios hangares de carga y almacenes hasta la base Lunar Spaceport Unison. La sede de la Sociedad de Naciones sobre la Luna consiste en una impresionante edificación que recubre la cara sur del cráter Shackleton, más los añadidos subterráneos.
Junto a la base principal, en el exterior, se sitúan algunos módulos ya obsoletos y que en la actualidad ejercen la función de pequeños edificios anexos con diferentes funciones: almacenaje, despresurización o simplemente para proteger partes sensibles de otros elementos. También hay un pequeño campo con decenas de depósitos de almacenaje del preciado helio-3, así como una extensa red de placas solares. Por último, a unos pocos centenares de metros de la base, destaca una enorme antena parabólica orientada hacia el cercano Monte Malapert, donde se sitúa la base de comunicaciones Thoth 1.
Todas las instalaciones expuestas a las adversas condiciones lunares en el exterior de la base Unison están protegidas con una aleación de polímero sintético molecular, configurada con espumas plásticas extremadamente resistentes y capaces de absorber el impacto de la mayoría de micrometeoritos.
Podemos dividir la base Unison en dos secciones principales: una primera planta exterior, dividida a su vez en cuatro edificios, y otra planta interior, que sólo resulta accesible desde alguno de los edificios exteriores.
Exterior Base Unison
La parte exterior de la base Unison recubre con láminas solares una importante sección de la ladera exterior del accidentado reborde del cráter Shackleton, aunque en realidad esta configuración de paneles oculta una vasta estructura donde se enclavan las cuatro secciones principales en las que está dividida la base. A esta disposición hay que sumarle un edificio que antecede a la base y que comunica directamente con el astropuerto Herekore a través de la pista pavimentada. Los cuatro edificios que configuran la fachada exterior de la base Unison son los siguientes:
Hangar
Se trata de la sección más antigua de la base, la primera que fue construida. Además, es el edificio más grande de toda la estructura y la puerta de comunicación de la base Unison con el astropuerto Herekore. Su entrada está presidida por el símbolo del dios egipcio Thoth, deidad relacionada con la equidad y la justicia. A pesar de que esta construcción fue la única con la que contó la base en su día, hoy su uso ha quedado relegado a servir de entrada para vehículos y pequeñas naves. Su interior consta de un espacio diáfano y muy amplio donde pueden maniobrar con facilidad vehículos que entren o salgan de la base. Además de puerta de embarque, la base contiene una serie de hangares donde se deposita la flota de naves y vehículos terrestres con los que cuenta la Sociedad de Naciones.
Depósitos y Almacenes
Otra de las secciones principales con las que cuenta la base Unison es el edificio que se corresponde con los almacenes. Al igual que el hangar anteriormente descrito, esta edificación es un espacio abierto donde se depositan todo tipo de herramientas y maquinaria. Aquí es posible encontrar los primeros robots gigantes con los que se excavaron las paredes del cráter, así como grúas, cementeras y maquinaria pesada con diversos usos. Por las especiales condiciones de la estructura, este recinto se restringe exclusivamente al almacenaje y depósito de material calificado como duro, es decir, poco sensible a golpes y accidentes. Justo bajo el subsuelo de esta construcción bajo tierra existen otras dependencias soterradas donde se almacenan los víveres y los depósitos de soporte vital, mucho más frágiles que la pesada maquinaria de la estancia superior.
Laboratorio de exploración y rescate
El sector cuadrangular, como se le conoce coloquialmente, es una zona de la base compartida donde conviven los laboratorios de equipo científico lunar y una unidad especialmente adiestrada para intervenciones de emergencia en superficie lunar. El laboratorio científico es uno de los tres con los que cuenta la Unison y su trabajo se centra en el análisis y estudio de las características físicas de la Luna. Aquí conviven científicos con estudios muy dispares, como astrofísicos, químicos, selenógrafos, geólogos y un largo etcétera. Por otra parte, en este sector de la base se despliegan los vehículos de exploración espacial, análisis de datos, comunicaciones e ingeniería espacial. Junto al trabajo de campo científico, y aprovechando la existencia de vehículos rover, se acantona el cuerpo de intervención rápida de la Unison: una unidad constituida por un centenar de efectivos especialmente adiestrados para operaciones de rescate, salvamento, vigilancia y control de la base.
Entre otros muchos experimentos, los ingenieros de la Unison trabajan en un nuevo material consistente (LiveLeaf), que mimetiza las funciones biológicas de la hoja de un árbol, capturando dióxido de carbono, agua (en muy pequeña proporción) y luz, liberando oxígeno. El material está fabricado con cloroplastos —la parte de la célula vegetal donde se produce la fotosíntesis—, suspendidos sobre una superficie confeccionada con seda proteínica. De tener éxito, este hallazgo proporcionaría a los astronautas un sistema autónomo de oxígeno que se autoregeneraría indefinidamente con elementos naturales y poco pesados.
Otro de los notables éxitos de científicos en el que trabajan actualmente en la base Unison ha sido el desarrollo de la técnica y maquinaria precisa para desviar asteroides y cometas de su trayectoria, y atraparlos en órbita geoestacionaria para explotar sus recursos. Sus esfuerzos dieron como resultado la captura del objeto 2008EA9 —de apenas 10 metros de diámetro—, que en el año 2049 pasó a menos de un millón de kilómetros de la Tierra. Estos investigadores lograron alterar la trayectoria del mismo hasta convertirlo en un pequeño satélite atrapado en la órbita de nuestro planeta durante un periodo de dos años, en los que consiguieron explotar todos sus recursos (minerales y agua). Ahora tratan de repetir su éxito desde la Luna, pero con un cuerpo de mayor envergadura.
Planta de Energía y Procesado
Esta parte está conectada a través de la cubierta exterior de la base Unison al interior del cráter mediante tuberías. Una alargada hilera de grandes depósitos coronan la estructura. El agua proveniente del hielo procesado en el interior del cráter asciende hasta este lugar para ser almacenada. A su vez, en su interior se experimenta con pequeños invernaderos y semilleros de crecimiento acelerado. Los científicos tratan de obtener un cultivo resistente a la radiación solar y que además sea capaz de recrear el proceso de la fotosíntesis en un entorno cerrado y falto de atmósfera, o atmósfera simulada. Además, en esta planta también se recibe y procesa la energía acumulada por las placas solares del exterior y se distribuye para sus diferentes usos por el interior de la base.
El resto de la planta en superficie está constituido por corredores y pasillos que conectan entre sí las diferentes secciones de la base y la dotan de una unidad estable. Además cuenta con varios ascensores de vacío que facilitan la movilidad de personal y maquinaria pesada entre los diferentes departamentos y edificios.
Interior Base Unison
El segundo nivel de la base, ya bajo el suelo lunar, tiene planta pentagonal —al igual que el emblema de la Sociedad de Naciones— con un gran vestíbulo central desde donde se accede a las cinco zonas principales de la planta. Sobre el suelo de este enorme distribuidor está dibujada la estrella emblema de la alianza, acompañada, una vez más, por el símbolo egipcio del dios Thoth.
Como decimos, desde este espacio común parten cinco corredores que son la puerta de entrada a las cinco secciones independientes en las que se divide el segundo nivel de la base Unison:
Gobierno y diplomacia
La primera gran sección de la base Unison responde al espíritu con el que se impulsó su construcción: la necesidad de dotar a la Luna de un espacio de encuentro para todas las naciones donde poder reunirse con ánimo de dirimir sus contenciosos. Este módulo, a su vez, se encuentra dividido en multitud de salas y habitáculos donde se celebran reuniones periódicamente o son sede de grandes eventos como cumbres o conferencias de paz.
De igual manera, esta sección cuenta con una serie de despachos y oficinas donde trabajan los funcionarios pertenecientes a la administración de la Sociedad de Naciones. Aquí se redactan las normas y reglamentos internacionales lunares y se acuerdan las órdenes de actuación para las fuerzas armadas adscritas a la defensa de los intereses de la Sociedad de Naciones en la Luna.
Por último, existe una zona de acceso restringido donde trabaja el gobierno local al mando de la base. En esta sección tiene su despacho Morten Mood, así como sus asesores y estado mayor. Aunque no es de dominio público, el despacho del gobernante de la base cuenta con una escotilla secreta que desciende hasta un búnker habilitado en las entrañas del complejo. Su uso está pensado para situaciones de emergencia, y está dotado con todo lo necesario para que un grupo reducido de personas sobrevivan durante un periodo máximo de dos semanas.
Zona militar
La otra gran sección de la segunda planta de la base Unison está destinada al alojamiento de las unidades del ejército de la Sociedad de Naciones. La planta se encuentra dividida principalmente en barracones de tropa y oficinas administrativas. A su vez, la planta cuenta con gimnasios, locales de ocio e incluso campos de tiro cubiertos.
Por último, en esta zona existe un módulo de contención y depósitos de munición, equipo, medicinas y armería. Sus paredes están especialmente reforzadas para evitar el deterioro y posibles accidentes con el armamento militar que se almacena en su interior. Su acceso está restringido a unas pocas personas. De hecho, todo el proceso de entrega y custodia de armas está mecanizado para evitar tener que poner un pie en su interior. Los efectivos de la Unison cuentan con tarjetas especiales que, al ser introducidas en unas rendijas habilitadas, activan un mecanismo que inmediatamente identifica al sujeto y le entrega su armamento a través de un ventanuco en el momento de su solicitud. Este mismo proceso se lleva a cabo a la inversa, la tropa entrega sus armas siguiendo el mismo sistema. Dentro, un quartermaster se encarga de comprobar los reportes de las misiones en las que han participado los soldados. Entre otros datos, verifican la hora y las coordenadas de cada disparo, ya que todas las armas poseen un sensor que registra su uso.
Espacio civil
De considerable menor tamaño que el resto de secciones, el área consignada a la población civil se erige en pequeños habitáculos unifamiliares que dan cobijo tanto a los funcionarios de la administración como a sus familias —las unidades del ejército cuentan con sus propias dependencias en la zona militar—, aunque también existe espacio para la acogida de personal científico o civil que, por diferentes motivos, habita en la base.
Su curioso aspecto en forma de panel de abejas le ha conferido el sobrenombre de: “la colmena”, pues todas las viviendas se cuadriculan unas sobre otras en una sucesión uniforme de agujeros similares.
El interior de las viviendas no es especialmente confortable, pues todo está pensado para su funcionalidad, aunque dadas las excepcionales condiciones que se dan en la Luna, la colmena ofrece una tímida y reconfortante sensación de hogar en comparación con el resto de la base.
Ciencia y mantenimiento vital
Tal y como sucedía en la zona militar, la sección de ciencia y soporte vital es de acceso restringido y sólo pueden penetrar en ella aquellos trabajadores cualificados para ello. Un gran reactor de fusión domina la parte central del recinto, el cual se encuentra protegido por enormes vidrios reforzados tipo XGlare (un vidrio sintético antibalas y antifragmentos consistente en la unión de varias capas de aluminio muy fino impregnadas con resinas y carbono), para así aislar la maquinaria de posibles accidentes. Por consiguiente, su estructura mecánica conecta las dos plantas de la base y, a su vez, horada el subsuelo por debajo de la planta, donde se ha instalado un segundo reactor de emergencia que permanece en estado latente. En esta zona también se encuentran los condensadores y acumuladores de los campos de placas solares.
Unas pasarelas colocadas a diferentes alturas recorren todo el perímetro de la barrera de vidrio, donde operarios y científicos trabajan para el normal funcionamiento del núcleo de soporte vital de la base. A su vez, en esta misma planta y rodeando al reactor se extiende un amplio distribuidor circular con docenas de laboratorios desde donde los diferentes equipos científicos llevan a cabo sus programas de investigación.
En este espacio también se realizan importantes experimentos para encontrar alternativas al suministro lunar de agua, un recurso finito y muy costoso de extraer. En la actualidad se trabaja en sistemas de reciclado y captura del agua condensada en atmósfera controlada de gravedad artificial.
Mucho más ambicioso resulta un proyecto que consiste en el uso de hidruros de metales no convencionales para producir agua en masa mediante modernos catalizadores de iridio. De hecho, parte del agua empleada en la Unison proviene ya de esta fuente.
Gobierno
El nombramiento de cargos en la base Unison se rige por un proceso de votación en el que se trata de conseguir un mayor consenso entre las diferentes potencias. Cada nación tiene derecho a presentar a un candidato que, posteriormente, deberá buscar los apoyos institucionales para su nombramiento. A su vez, cada estado tiene derecho a un único veto durante todo el proceso, lo que limita que salgan elegidos candidatos pertenecientes a potencias desestabilizadoras y que pongan en peligro la neutralidad de la institución.
Por lo general, se necesitan varias vueltas en las que se van eliminando candidatos —bien por falta de apoyos o por los vetos recibidos— hasta que al final queda un reducido grupo de 16 postulantes entre quienes sale elegido el ganador que presidirá la Sociedad de Naciones.
Este proceso democrático se repite con una regularidad de cuatro años. Durante el sufragio, todos los países tienen derecho a presentar un candidato, vetar a otro y elegir entre los restantes. El resultado suele ser la elección de un candidato perteneciente a alguna de las naciones consideradas neutrales, que garantice la imparcialidad de las decisiones adoptadas por la institución. Se podría considerar la jefatura de la Sociedad de Naciones como un gobierno burócrata libremente elegido.
En la actualidad, año 2075, el mando de la Lunar Spaceport Unison se encuentra en manos del noruego Morten Mood, antiguo comandante de la Sociedad de Naciones en la Tierra y condecorado héroe en destacadas intervenciones militares de la institución.
Ejército
Como es bien sabido, la Sociedad de Naciones no cuenta con un ejército propio, en su lugar se sirve de las conocidas como Fuerzas de Paz de la Sociedad de Naciones, coloquialmente denominadas “cascos azules” debido al color de los mismos. En realidad se trata de agrupaciones militares creadas ad hoc con el propósito de mantener la paz en áreas de conflictos y de brindar asistencia a ex combatientes en la implementación de tratados con fines pacíficos. Actúan por mandato directo del Consejo de Seguridad de la Sociedad de Naciones y forman parte unidades de las fuerzas armadas y policiales de los países miembros integrantes de ésta, conformando una fuerza multinacional. No se trata, por tanto, de un ejército permanente, sino más bien una fuerza multilateral integrada por tropas diversas organizadas para muy determinadas intervenciones.
No obstante, la Sociedad de Naciones cuenta con un pequeño retén militar internacional (League of Nations Commission for the Moon o LNCM) en la base Unison, encargado de mantener la seguridad y proporcionar asistencia en caso de necesidad o catástrofe. Esta tropa se compone actualmente de las siguientes unidades, aunque rotan anualmente, siendo reemplazadas por otros destacamentos de variada procedencia y nacionalidad.
-
Hans Majestet Kongens Garde (HMKG): En este momento, una compañía de la unidad de élite noruega HMKG (Guardia Real) forma parte del LNCM. Se trata de una compañía reforzada con material pesado y armaduras de combate especialmente diseñadas para operar en la Luna.
-
Grupo de Acción Rápida de la Guardia Civil (GAR): Formando parte del LNCM se encuentran dos pelotones del grupo de operaciones especiales de la Unidad de Acción Rural de la Guardia Civil (UAR), conocido como Grupo de Acción Rápida. El GAR tiene como misión específica la lucha contra elementos terroristas y la ejecución de operaciones que entrañen gran riesgo y requieran una respuesta rápida a través de reconocimientos especiales, así como la especialización de su personal operativo en operaciones de intervención. Los grupos GAR destacados en Unison están equipados con mech ligeros de reconocimiento y vehículos de apoyo, incluyendo mechs del tipo Blas de Lezo y Pizarro.
-
Garud Commando Force: Una unidad especial del Ejército Indio proporciona apoyo logístico y vehículos lanzadera a las fuerzas del LNCM. Se trata de una compañía dotada de transportadores de superficie tipo Garuda y lanzaderas DAL-Hruv23. Adicionalmente, el destacamento Garud despliega un escuadrón de cazas orbitales multirol tipo 113-Vijay (derivado del Raumjäger-113 alemán).
-
Interpol: Un destacamento de 50 agentes de la Interpol sirve en la base Unison encargándose de diversos cometidos, entre los que se incluye el mantenimiento de la seguridad en la instalación y la persecución de posibles actividades delictivas que vulneren el derecho internacional, tanto en la base de la Sociedad de Naciones como en otros emplazamientos lunares.
**** RECUADRO ****
Interpol
La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) es la mayor organización de policía mundial, con 190 países miembros, por lo cual es la segunda organización global más grande del mundo, tan sólo por detrás de la Sociedad de Naciones. Creada en 1923, apoya y ayuda a todas las organizaciones, autoridades y servicios cuya misión es prevenir o combatir la delincuencia internacional.
En 1975, por acuerdo internacional en el seno de la Sociedad de Naciones, se acordó que Interpol quedara bajo control de ésta para salvaguardar así su independencia e integridad, decidiéndose dotar a la misma de un cuerpo de agentes permanente, cuya base central operativa seguiría sita en la ciudad francesa de Lyon.
Su actual presidente es el venezolano Arturo Noble Verdugo.
Dentro de la propia Interpol hay distintas unidades especializadas en diversos tipos de crímenes. De entre dichas unidades destaca el conocido como Departamento de Amenazas Emergentes o DAE. El DAE es una unidad pequeña, cuenta con apenas 30 miembros, aunque éstos se cuentan entre los mejores agentes policiales, militares y científicos de todo el planeta, con acceso a la más avanzada tecnología disponible. Oficialmente, el DAE no es más que un grupo de expertos policías especializados en tecnologías de vanguardia, aunque la misión real del DAE es impedir que las nuevas tecnologías emergentes (inteligencia artificial, nanotecnología, biotecnología, genética, etcétera) se descontrolen o caigan en manos de peligrosos criminales internacionales. El DAE es una rara muestra de colaboración entre los distintos bloques, pues sus agentes manejan información que comprometería a todos los implicados (ya que la mitad de los problemas con los que el DAE se enfrenta han sido desarrollados por los propios gobiernos y sus corporaciones), pero funciona bajo un acuerdo tácito de "no echarse las culpas" que hasta el momento ha permitido un funcionamiento satisfactorio de la unidad. De los 30 agentes que tiene el DAE, 16 están en la Tierra, 7 en la Luna y otros 7 repartidos entre Marte y las estaciones orbitales. Los 7 agentes que están en la Luna tienen sus oficinas principales en la zona militar de la base Unison, aunque también poseen una pequeña comisaría (con habitaciones incluidas) en El Núcleo.
**Fin de recuadro**
Por la propia naturaleza de la institución, la Sociedad de Naciones carece de un servicio de espionaje y contrainformación reconocido. Tan sólo posee un sistema de satélites y captación de movimiento de tropas que sirven de referencia al ejército sobre la situación estratégica del resto de ejércitos sobre la Luna. En caso de conflicto, la Unison cuenta con un cuerpo especial de personal diplomático que negocia con las partes implicadas y los conmina a alcanzar acuerdos de paz.
Sociedad
La base Unison es un verdadero crisol de culturas donde individuos de muy diversa procedencia trabajan codo con codo en un ambiente de concordia y colaboración, aunque no pocas veces surgen disputas y problemas, fundamentalmente por las especiales condiciones de la propia base, donde espacio y recursos son limitados.
Cada pocos meses, parte del personal es relevado para volver a la Tierra, aunque no pocos funcionarios de la Sociedad de Naciones han decidido establecer en la Luna su domicilio permanente. De igual manera, los diferentes programas de experimentación científica cuentan con personal variable, que oscila en función de la duración de los experimentos que se desarrollan en suelo lunar. La base Unison es un espacio de encuentro para programas en el que colaboran distintos equipos científicos procedentes de diferentes naciones.
Así pues, la sociedad en la base Unison es una entidad en constante cambio, donde rara vez se establecen vínculos sociales duraderos.
Cabe destacar que la lengua oficial en la base Unison es el esperanto, aunque se requieren conocimientos de inglés y alemán para trabajar en la Sociedad de Naciones. El esperanto es el idioma oficial de la Sociedad de Naciones desde que fuera implantado, a petición de muchas naciones, en 1920. Desde entonces, se ha establecido como un idioma importante, al nivel del español, inglés, francés o alemán. Es el idioma de la diplomacia internacional, usado en las asambleas y consejo de seguridad de la Sociedad de Naciones. Todas las naciones del mundo han adoptado el esperanto como lengua vehicular en sus sistemas educativos menos los alemanes, que consideran al mismo un invento judío. No en balde, el creador del esperanto, un oftálmologo polaco, Lazaro Lamenhof, era de origen judío, y la lengua incorpora algunos vocablos hebreos. Con todo, los diplomáticos nazis dominan la lengua para manejarse en las turbias aguas de la política internacional.
La presión psicológica que ejerce la Luna sobre sus habitantes puede resultar fatal. Uno de los males comunes que sufren los colonos es la sensación de aislamiento y de sentirse atrapados en un entorno que resulta hostil. Habituales son los brotes psicóticos que parecen presentar algunos pacientes durante estancias prolongadas en la Luna. En ocasiones, estos brotes derivan en resultados catastróficos, como suicidios, mutilación o conductas agresivas. Por eso, tan importante como los avanzados experimentos que se llevan a cabo en los laboratorios, resulta disponer de un amplio espacio donde los habitantes de la base puedan ocupar la mente en asuntos triviales que les hagan olvidar la situación en la que se encuentran y les permita interactuar con otras personas en su misma situación.
Esta sección de la base está diseñada exclusivamente para relajación del personal. Es una especie de gran bazar donde tienen cabida todo tipo de actividades de ocio y tiempo libre. Aquí es fácil encontrar salas de proyección, bares, cafeterías, tiendas que ofrecen los más variados productos, galerías, parques infantiles y actuaciones ocasionales de artistas llegados desde el planeta Tierra. Esta pequeña ciudad del ocio en Unison también tiene su lado oscuro, pudiéndose encontrar en sus callejones más recónditos drogas de diseño, armas de contrabando, biomods, implantes y sexo. Algunos bares y clubes son muy reputados, como el Stockholm, con una extensísima lista de cócteles internacionales; o el siempre animado Bermuda, con sus bailarinas exóticas y ambiente relajado. Cualquier cosa que permita un cambio en la rutina siempre es bien recibida por los colonos de la base.
Personajes destacados
Éstos son algunos de los personajes más importantes de la Base Unison.
Comandante Morten Mood
Nacionalidad: Noruego.
Cargo: Administrador de la base Lunar Spaceport Unison.
Hombre de ruda apariencia pero de aguda inteligencia, su candidatura como dirigente de la base Unison obtuvo un amplio consenso por parte de la mayoría de las naciones.
Probablemente contó a su favor su participación en el conflicto que se originó durante la escalada de violencia del año 2058, cuando Pakistán atacó posiciones indias en Cachemira y obligó al resto de naciones a posicionarse en uno u otro bando. La rápida intervención de la Sociedad de Naciones, que desplazó un contingente al mando del entonces coronel Mood, evitó un choque armado a gran escala cuando el oficial supo mantener la calma y propició los primeros encuentros diplomáticos entre los bloques implicados en el conflicto.
La sangre fría que demostró durante la crisis (probablemente por su origen noruego), sumada a su dilatada carrera militar, propiciaron su candidatura como la persona ideal para dirigir la base lunar Unison, donde se precisaba alguien con un temperamento firme y determinado ante las presiones externas.
El comandante Morten Mood es un militar estricto. No tolera conflictos que pongan en peligro la estabilidad y correcto funcionamiento de las instalaciones lunares de la Sociedad de Naciones. De hecho, una de sus primeras actuaciones consistió en reforzar la base militar con la que cuenta la Unison en el Mare Serenitatis (Unison Woodrow Wilson) y solicitar una ampliación del contingente presente en Unison.
Su tajante determinación y su poca predisposición a decantarse por una u otra causa le han granjeado no pocas enemistades. El comandante Morten es una de las pocas personas verdaderamente íntegras y leales en la Luna, todo un ejemplo de entereza y buena disposición
Nombre (PD): Morten Mood (199 PD).
Sexo / Edad / Altura / Peso: masculino / 60 años / 1,76m / 85 kg.
Humanidad (Estrés): 80 (25).
Destino (Aspectos): 3 (Todo se hace según el protocolo).
Talentos: entrenado en otra gravedad (gravedad cero), estratega, rango 6 (comandante).
Habilidades: agilidad 2, armas cortas 2, armas largas 2, atención 2, averiguar intenciones 3, computadora 1, conducir vehículos (ligeros) 1, conducir vehículos (pesados) 0, conocimiento (leyes) 0, demoliciones 0, esquivar 2, etiqueta 2, lenguaje (alemán) 3, lenguaje (ingles) 2, lenguaje (noruego) 3, lenguaje (ruso) 2, liderazgo 3, pelea 2, persuadir 2, sigilo 1, supervivencia 1, vigor 3, voluntad 3.
Atributos de Combate:
-
INI: +2
-
AC: 6
-
MOV: 3
-
RD Fatiga: +1
-
RD con Armadura: No suele llevar armadura, pero si la necesita puede acceder a cualquiera de NT 8.
-
Bono al Daño: +1
-
Heridas: 7/11/14/16/17
-
-
-
-
Fatiga: 7/11/14/16/17
-
-
-
Goran Slobodan
Nacionalidad: Yugoslavo.
Cargo: Jefe de la sección de Ciencia y Experimentación de la base Unison.
Goran fue uno de los primeros colonos que llegó a la base Unison como miembro del equipo científico que habría de certificar la viabilidad de la construcción de la base. Participó así en los primeros experimentos sobre condiciones atmosféricas y habitabilidad.
Su dilatada formación como químico y astrofísico le permitió obtener un puesto en el primer programa de exploración lunar que se desarrollaría con fondos internacionales. La entonces primigenia Unison apenas contaba con un almacén como laboratorio y el equipo que traían los mismos científicos recién llegados a la Luna. Poco después, se postuló como candidato a dirigir la sección científica de la base. Desde entonces han transcurrido más de 25 años y, hasta la fecha, el científico no ha abandonado jamás el lugar, enfrascado en coordinar la multitud de experimentos que se desarrollan sobre la cada vez más floreciente base Unison.
Parece mentira, pero el bueno de Goran no había encontrado el amor hasta ahora, enfrascado como estaba en sus investigaciones y responsabilidades administrativas. Hace apenas un par de meses, pudo conocer a una guapa y diligente joven bióloga rumana, Inna Ionescu, recién llegada desde la Tierra para incorporarse al equipo científico de la base. En poco tiempo, la pareja entabló amistad y surgió el amor. Pero en realidad, nada hay de esto, al menos por la parte que le toca a ella, pues se trata de una hábil espía del KGB entrenada por los soviéticos para seducir al viejo doctor y acceder a todas sus investigaciones más relevantes y secretas.
Nombre (PD): Goran Slobodan (165 PD).
Plantillas Profesionales: astronauta científico (W133).
Sexo / Edad / Altura / Peso: masculino / 69 años / 1,68m / 94 kg.
Humanidad (Estrés): 70 (15).
Destino (Aspectos): 3 (No abandonaré la Luna jamás. Locamente enamorado).
Talentos: entrenado en otra gravedad (gravedad cero), superviviente (espacio).
Habilidades: agilidad 2, armas cortas 1, atención 2, averiguar intenciones 1, ciencia (ingeniería) 3, ciencia (biología) 1, ciencia (física) 1, ciencia (matemáticas) 1, ciencia (medicina) 0, computadora 2, comunicaciones 1, electrónica 1, esquivar 1, etiqueta 3, lenguaje (alemán) 1, lenguaje (ingles) 1, lenguaje (yugoeslavo) 3, lenguaje (ruso) 1, liderazgo 1, mecánica 1, navegación 1, pelea 1, persuadir 1, pilotar (aeronave) 1, pilotar (astronave) 1, sensores 1, supervivencia 1, vigor 2, voluntad 2.
Atributos de Combate:
-
INI: 2
-
AC: 6
-
MOV: 2
-
RD Fatiga: +1
-
Bono al Daño: +1
-
Heridas: 6/9/11/13/14
-
-
-
-
Fatiga: 6/9/11/13/14
-
-
-
Salah Abdel Nasser
Nacionalidad: Egipcia.
Cargo: Funcionario de la SN y activista del IS.
Salah tiene un sueño: algún día la Luna será un territorio independiente y libre de banderas infieles manchadas de sangre. El joven egipcio es un funcionario administrativo de la Sociedad de Naciones que trabaja en la base Unison. Anteriormente sirvió en el ejército egipcio, concretamente en el grupo especial antiterrorista Grupo 777 (الوحدة 777 قتال), por lo que posee formación militar.
Para los demás compañeros de la base, Salah no es más que el taciturno egipcio que prefiere encerrarse en su cápsula para estudiar antes que acompañarlos durante las horas de permiso al Bermuda para tomar unas cervezas y ligar con sus exuberantes camareras. Un peón insignificante más entre las docenas de operarios con los que cuenta la Unison.
Sin embargo, Salah es un peligroso terrorista del grupo islamista-yihadista suní Estado Islámico, más conocido por sus iniciales en inglés de Islamic State (IS), o الدولة الإسلامية en árabe, es decir: ad-Dawlah al-ʾIslāmiyyah. El IS, en realidad es una facción escindida de Al-Qaeda, actualmente dirigida por Ezzedim Salim (cuya identidad y aspecto es un verdadero misterio). Propugna la creación de un gran califato que aglutine a todas las naciones de confesión islámica. Actualmente, el IS está muy activo en Siria, Irak, Líbano, Jordania, Palestina y Egipto, cometiendo salvajes actos terroristas y subversivos contra los respectivos gobiernos legítimos de estos países. El grupo, que cuenta con miles de seguidores y combatientes, dispone de enormes sumas de dinero procedentes en su mayoría de importantes donantes anónimos saudíes.
Ahora el IS ha puesto sus miras en la Luna, considerando a ésta como parte de la identidad islámica (la media Luna islámica), un símbolo tradicional de su religión, pues no en balde el calendario árabe se rige por los ciclos lunares, marcando una media luna creciente el inicio del sagrado Ramadán. El IS quiere ver libre de infieles la Luna y que ésta forme parte del gran califato que está por venir.
Para conseguir sus propósitos, el IS se sirve de individuos muy preparados, como Salah. En un principio, se le ordenó infiltrarse en el NAO, sirviéndose de su red de informadores y activistas para más adelante preparar un gran atentado terrorista en la base reivindicándolo para el IS. Hasta ahora, su misión ha consistido en transmitir información relevante como número de efectivos, vehículos, entradas y salidas de cargueros, distribución de las dependencias y, en general, cualquier dato importante.
Nombre (PD): Salah Abdel Nasser (185 PD).
Plantillas Profesionales: soldado genérico (W139).
Sexo / Edad / Altura / Peso: masculino / 35 años / 1,72 m / 68 kg.
Humanidad (Estrés): 70 (12).
Destino (Aspectos): 3 (La Luna será un territorio libre de infieles. Donde Ezzedim Salim señala, yo voy).
Talento: entrenado en otra gravedad (gravedad cero), sigiloso.
Habilidades: agilidad 3, armas cortas 3, armas largas 2, armas montadas 0, armas pesadas 0, atención 2, averiguar intenciones 2, computadora 3, comunicaciones 1, conducir vehículos (ligeros) 0, conducir vehículos (pesados) 0, conocimiento (historia) 0, conocimiento (leyes) 1, delito 2, demoliciones 2, engañar 3, esquivar 1, lenguaje (alemán) 0, lenguaje (árabe) 3, pelea 2, sigilo 3, supervivencia 2, vigor 3, voluntad 2.
Atributos de Combate:
-
INI: +3
-
AC: 7
-
MOV: 3
-
RD Fatiga: +1
-
RD con Armadura: No suele llevar armadura, pero tiene oculta una Armadura de Nanofibras (NT 8, RD 4, solo cubre el torso) en caso de necesitarla.
-
Bono al Daño: +1
-
Heridas: 7/11/14/16/17
-
-
-
Fatiga: 6/9/11/13/14
-
-
-
**** RECUADRO****
Un Estado Lunar Independiente
Cuando comenzó la carrera por conquistar el espacio y colonizar otros mundos, no fueron pocos intelectuales los que interpretaron estas señales como una nueva oportunidad para la humanidad de comenzar de nuevo, de evitar los oscuros errores del pasado que la habían conducido a su precaria situación. De las universidades salían panfletos con una hoja de ruta sobre el escenario ideal una vez la humanidad conquistara la Luna. Se fundarían ciudades libres de banderas, sin fronteras ni estados que se enfrentaran por territorios. En esta Nueva Tierra sólo habría espacio para una nueva forma de entender la vida. Una nueva era de oportunidad.
Sin embargo, el manifiesto pronto se convirtió en papel mojado cuando alemanes primero, y aliados después, plantaron sus banderas en la Luna y reclamaron el territorio ocupado como propio. Desde entonces, el resto de naciones optaron por considerar la conquista espacial como una prolongación de sus respectivas naciones. Es decir, se trasladaban los errores del pasado al espacio exterior, y la utopía de una Nueva Oportunidad se desvanecía sin remisión.
Pero no todos se resignaron a este nuevo escenario de ocupación. Algunos se propusieron combatir contra lo que consideraban un error de la Humanidad. Se fundó así la organización NAO (New Age Opportunity) cuya consigna era un espacio libre de banderas, sin fronteras ni estados. Sólo ciudadanos libres que adoptaran su propia legislación, iniciando un proceso constituyente que enmendaría para siempre los errores que se habían cometido en la Tierra.
En esta utopía por un mundo mejor no tenían cabida las bases nacionales que se estaban construyendo con el fin de explotar los recursos naturales del satélite para alimentar intereses partidistas. Cuando la Sociedad de Naciones decidió hacerse cargo del reparto territorial y erigirse en representante internacional con potestad para legislar sobre los intereses de la Luna, la organización NAO se sintió engañada y se radicalizó.
Tras una serie de incidentes, tales como altercados contra la autoridad, lanzamiento de pintura roja contra representantes de la Sociedad de Naciones, sabotajes en oleoductos y una actividad guerrillera de baja intensidad, la NAO fue considerada como grupo terrorista y sus miembros detenidos o puestos en busca y captura.
En la actualidad, la organización posee ramificaciones en la mayoría de los países de la Tierra. Las universidades son su principal cantera y donde reclutan a la mayoría de los nuevos adeptos para la causa. La Luna también es un objetivo prioritario para la NAO, pues es precisamente por la libertad de este nuevo mundo por el que combaten, aunque por las particulares circunstancias que presenta el satélite, lo hacen infiltrados entre personal de las diferentes bases establecidas, sobre todo en la base Unison, por demostrarse más accesible.
Las actuaciones del grupo rebelde están supeditadas a su carismático líder: Damien Donner, valedor intelectual de la organización y máximo dirigente de la hermandad. Su nombre figura entre los más buscados por las autoridades de todo el mundo, aunque pocos conocen su identidad real.
**** FIN DEL RECUADRO ****
Bases dependientes
Aparte de la base Unison, en el territorio de la Sociedad de Naciones hay más bases, siendo las más importantes:
Base Thoth 1
La principal base de telecomunicaciones con la que cuenta la base Unison se haya instalada sobre el Monte Malapert —en las proximidades del cráter Shackleton— en una elevación del terreno en el reborde del cráter del mismo nombre. En su cima se ha instalado un moderno sistema robótico de transmisiones por radio-láser, que mantiene contacto permanente con la Tierra, la estación espacial Covenant (anteriormente Amity) y los satélites de la Sociedad de Naciones en órbita. En esta instalación de uso civil también se haya destacado un pequeño contingente militar de seguridad.
Base Woodrow Wilson
Como medida preventiva ante posibles conflictos entre las dos principales potencias asentadas sobre suelo lunar, la Sociedad de Naciones aprobó la instalación de un destacamento militar en Mare Serenitatis, en la demarcación fronteriza entre Mare Tranquillitatis y Mare Imbrium, territorios bajo influencia de los aliados y del Eje respectivamente. En la base Woodrom Wilson se encuentra desplegado en la actualidad un destacamento GAR de la Guardia Civil española y tropas noruegas. Estas unidades rotan cada pocos meses, siendo sustituidas por otras fuerzas armadas de diversas nacionalidades.
Astropuerto Herekore
Muy cerca de la base Unison, y unido a ésta por medio de una pista de tránsito, se encuentra el astropuerto Herekore, una enorme instalación cuyo objetivo es servir de lanzadera y recepción para todo tipo de naves. No sólo dispone de unos magníficos hangares, sino que la base cuenta con su propia infraestructura que la hace prácticamente independiente de la Unison.
Tramas para aventuras
-
Con ánimo de acercar posiciones, la base Unison ha organizado un campeonato de ajedrez en el que podrán participar representantes de todas las bases lunares. Lejos de conseguir su objetivo, el torneo se ha convertido casi en un asunto de estado, ya que la rivalidad entre las potencias se ha trasladado al tablero de ajedrez. En juego está nada menos que el orgullo de sus naciones, así que las acusaciones de espionaje, entrenamientos secretos y nanotecnología implantada en los jugadores son constantes.
-
La corporación alemana IG Farben planea construir un laboratorio secreto de investigación militar en la cara oculta de la Luna con la intención de elaborar potentes toxinas bacteriológicas y armamento avanzado.
-
En el último carguero con suministros se ha localizado a un polizón oculto en el compartimento de carga. El joven, con apenas 27 años, asegura que huyó tras escuchar sin querer una conversación que desvelaba un plan para atentar contra el presidente de la Sociedad de Naciones. El joven, un tailandés de nombre Weerachon Sukondhapatipak, es en realidad un agente japonés trabajando para una célula Tokkō, o Tokubetsu Kōtō Keisatsu (特別高等警察), un cuerpo policial secreto imperial conocido popularmente como Policía del Pensamiento y consagrado a la persecución de elementos subversivos, terroristas y activistas políticos. Los agentes Tokkō son especialistas en operaciones encubiertas o psy-ops (operaciones de inteligencia o contrainteligencia), empleando el más moderno equipo e implantes. Weerachon tiene como misión infiltrarse en la base para hackear sus sistemas introduciendo en sus equipos un moderno nanobot capaz de controlar todas las funciones de sus sistemas de seguridad.
-
Un asteroide de tamaño considerable se dirige a la Luna en trayectoria de colisión. Se cree que el objeto tardará aún ocho meses en impactar contra el satélite, con imprevisibles consecuencias para todas las colonias asentadas en el territorio. La Sociedad de Naciones ha expuesto el problema al que se enfrentan y ya coordina un equipo de ingenieros y militares que viajarán hasta el asteroide para tratar de fragmentarlo o desviar su rumbo.
-
En los radares de la base Unison se han recogido varias emisiones cuyo código resulta indescifrable. Lo curioso del fenómeno es que las transmisiones no parecen proceder de la Tierra ni de ninguna nave en órbita. Todo parece confirmar que se trata de emisiones llegadas desde Calisto, uno de los satélites de Júpiter.